A medio ejercicio de cumplir los 36 años, Victoria Azarenka se prepara para disputar su #17 Open de Australia, que podrían ser más de no ser por aquellos años donde estuvo alejada del circuito. La bielorrusa es una de las grandes veteranas dentro del cuadro, pero en su cabeza todavía pasa la idea de afrontar estos retos de una manera especial, diferente a todas las anteriores. Así lo intentaba explicar antes de su partido de primera ronda.
“Estoy emocionada de estar de vuelta a este torneo, aunque este año lo quiero abordar con una mentalidad diferente, que tenga algo menos que ver con mi juego y simplemente encontrar alegría por estar aquí, quiero quitarme esa presión de los resultados para mejorar día a día. Estoy tratando de encontrar diferentes formas de abordar esa mentalidad, mi horario y la forman la que juego. Seguro que prestaré atención a los aspectos técnicos y tácticos, pero quiero tener una visión más general”, valoró Vika.