
El tiempo corre de forma inexorable y ya nos plantamos a mediados de abril con la gira de tierra batida completamente inaugurada con la finalización del Masters 1000 de Montecarlo 2025. El primer gran torneo sobre polvo de ladrillo, a pesar de no ser de total obligatoriedad para los jugadores, contó con la mayoría de estrellas actuales del circuito y nos dejó buenos partidos con los que volvemos a disfrutar de la superficie lenta. Los meses de pista dura nos dejaron muchas conclusiones a tener en cuenta, pero ahora el tenis cambia totalmente y es el momento de los grandes especialistas para reivindicarse.
Un Masters 1000 de Montecarlo que deja como campeón a Carlos Alcaraz tras una final enrarecida por la lesión de Lorenzo Musetti en el psoas (3-6 6-1 6-0), pero que nos confirma cinco conclusiones que podían verse venir, o no, en las últimas semanas.
- Novak Djokovic, sin rumbo
Sabemos perfectamente que el serbio tiene como principal prioridad los Grand Slams, pero tras conseguir la medalla en los Juegos Olímpicos de París 2024 experimenta bajones de nivel tremendos que parecen por la falta de motivación lógica. El título 100 está a la vuelta de la esquina y puede seguir batiendo récords, pero duele ver jugar a un nivel tan bajo al jugador más laureado de la historia del tenis. "Lo siento por la gente que ha visto esto. Había una posibilidad de jugar así, pero ha sido horrible", espetó en rueda de prensa tras la dura derrota ante Alejandro Tabilo (6-3 6-4). La pregunta ahora es sí jugará de esta forma también en los Masters de Madrid y Roma, las citas que disputará previas a Roland Garros.
- No se puede desconfiar de Carlos Alcaraz
Quizá no ha sido el mejor torneo del murciano ni de los que más se recordarán, pero viajar por segunda vez a Montecarlo y ganar el título no es algo al alcance de muchos. Francisco Cerúndolo, Daniel Altmaier, Arthur Fils, Alejandro Davidovich y Lorenzo Musetti han sido sus rivales hasta alcanzar la gloria en el Principado, y es cierto que solo pudo ganar 2-0 a Davidovich y Altmaier, sin embargo, Carlos se mostró fuerte mentalmente y dio la vuelta a encuentros muy exigentes como ante Fils, que le puso las cosas verdaderamente difíciles. Alcaraz no llegaba en buen momento a Montecarlo tras la derrota en la semifinal de Indian Wells frente a Jack Draper y la caída prematura en el Miami Open contra David Goffin, pero se puso el mono de trabajo y consiguió un nuevo título para empezar la gira de tierra batida de la mejor forma.
- Stefanos Tsitsipas no arranca ni en su torneo fetiche
La caída de nivel del griego en las últimas temporadas es notoria, aunque no esperábamos que se tradujera también en el torneo que mejor se le da. Derrotó a Jordan Thompson con algunas dudas y vapuleó a Nuno Borges para ir de más a menos frente a Musetti. Iba set arriba cuando le aparecieron los fantasmas de la desconfianza y su revés comenzó a hacer aguas para que el italiano se creciese como nunca. Ahora, fuera del top 15 del ránking, intentará buscar el ATP Conde de Godó, campeonato en el que ha llegado a cuatro finales sin lograr el título.
- Nueva oportunidad perdida para Alexander Zverev
Se puede decir alto y claro: Zverev ha vuelto a desaprovechar una gran oportunidad en su carrera. El alemán tenía durante estos meses una gran opción de arrebatarle el puesto a Jannik Sinner como número uno o al menos de acercarse, pero lo cierto es que sigue a prácticamente 2.500 puntos del italiano y Alcaraz le ha arrebatado el segundo puesto. Un Zverev que recuerda al que peor estuvo antes de su larga lesión de ligamentos del tobillo en 2022, pues no muestra agresividad ni hambre en pista. Podríamos decir que hasta se le ve con miedo en los momentos importantes, como le ha ocurrido en múltiples ocasiones en 2025.
- Davidovich y una gran progresión
La buena nota del torneo debe ser para Alejandro Davidovich, que volvió a evidenciar que en Montecarlo se siente diferente y puede mostrar un nivel excelso de tenis. Superó a Tomás Etcheverry en un partido que supo aguantar muy bien el tirón inicial del argentino, pudo sobrevivir a la "montaña rusa" que vivió frente a Jack Draper y también se deshizo de Alexei Popyrin para plantarse en la semifinal por segunda vez en Mónaco. Así, el malagueño vuelve a irrumpir en el top 30 y confirma que las finales en las que cayó frente a Thomas Machac en el ATP Acapulco y contra Miomir Kecmanovic en el ATP Delray Beach no hicieron mella mental en él.