
Se avecinan buenos tiempos para el tenis mundial, con una nómina de jóvenes jugadores repletos de potencial, carácter competitivo y personalidad. De los 35 mejores del actual ranking ATP, hay ya un total de 15 que han nacido en el siglo XXI, suponiendo esto una seria amenaza para la generación de tenistas nacidos a final del siglo XX, que pueden haber visto pasar sus mejores tiempos.
Fueron presentados como la generación llamada a desbancar de la gloria al Big 3 y se acuñó un término para potenciar su imagen de marca. Tenistas como Zverev, Rublev, Tsitsipas, Ruud, De Miñaur, Fritz , Paul, Tiafoe, Khachanov, Hurkacz o Berrettini han vivido días de gloria y saben lo que es sumar grandes títulos muchos de ellos, y ser protagonistas en citas de primer orden durante años. Otros muchos se quedaron en el camino y no cumplieron con las expectativas, pero sobre todos ellos pende una espada de Damocles permanente, como es la de que no fueron capaces de imponer su autoridad frente a eminentes veteranos.
- La generación de finales del siglo XX se ve muy amenazada por los nuevos talentos
Una vez el Big 3 y toda la generación que compitió contra ellos ha ido entrando en un inexorable ocaso, parecía el gran momento de todos estos tenistas, pero surgen ahora generaciones de tenistas con mayor empaque y potencial de lo que ellos mostraron a la edad en que estos empiezan a destacar. Únicamente Daniil Medvedev consiguió tocar el cielo con un título de Grand Slam y el número 1 del mundo, cundiendo la sensación de que va a ser muy difícil para el ruso emular esa gesta, pero aún más para sus coetáneos degustar las mieles del paraíso tenístico.
No solo Jannik Sinner y Carlos Alcaraz serán los grandes obstáculos para impedir que el proceso de madurez de esa generación citada traiga títulos importantes para ellos. Resulta evidente que el nivel del italiano y el español es superior y parecen llamados a marcar una época, pero es que los que deberían ser alternativas a su poder durante toda su carrera, muestran un nivel de juego y potencial que mete miedo a todo el circuito ATP.
- Jugadores de diversos estilos están ya destacandos y parecen tener un techo mayor que el de la generación anterior
Jack Draper, Holger Rune, y Ben Shelton reúnen todo lo necesario para presentar una firme candidatura a ganar algún Grand Slam, mientras que Lorenzo Musetti y Arthur Fils pueden erigirse en especialistas modernos en tierra batida, que opten a cosas importantes en esta superficie, sin menospreciar su potencial en pista dura. Los checos, Tomas Machac, Jiri Lehecka y Jakub Mensik pueden dar gloria a su país, un sacador como Giovanni Mpetshi-Perricard aportará variedad al juego, el tenis estadounidense se relame con Learner Tien, Brandon Nakashima y Alex Michelsen, mientras que no se puede dar por perdido a un talento como el de Félix Auger-Aliassime.
- Fonseca sugiere la formación de un nuevo Big 3 con Alcaraz y Sinner, pero otros muchos tenistas muestran un nivel muy alto
Por si fueran pocos todos estos candidatos a enfangar la trayectoria de Alcaraz y Sinner, poniendo en entredicho la coexistencia de dos grandes imperios, surge con fuerza el caso de Joao Fonseca. Aún es pronto, pero lo que muestra el brasileño con tan solo 18 años hace estremecer a cualquiera y abre en el imaginario colectivo la posibilidad de que se forme un nuevo Big 3. Teniendo todo esto en cuenta, ¿qué se puede esperar de los tenistas nacidos en el tramo final del siglo XX y que afrontarán en el próximo lustro su etapa de madurez? La respuesta podría ser preocupante para todos ellos.