Nada es suficiente en el mundo del deporte, al igual que en la vida, y la consecución de un gran logro trae aparejado ya el pensar en el futuro. Italia es el país dominador del tenis actual y puede lograr algo realmente único en la historia de la Copa Davis. Para ello, necesitará mantener el bloque de cara a la próxima edición.
Podemos estar asistiendo a la gestación de un gran imperio. No, no hablamos de Jannik Sinner, aunque también podríamos hacerlo y necesitaríamos un amplio capítulo aparte, sino del equipo italiano de Copa Davis. Los títulos en las dos últimas ediciones por parte de los transalpinos son el fiel reflejo de una generación rebosante de talento, fruto de un gran trabajo institucional.
Ganar dos años consecutivos esta competición es algo que muy pocos países han logrado desde 1972, cuando se democratizó la competición y se impuso un formato como el que era tradicional. Sin embargo, encadenar tres Ensaladeras de forma consecutiva supondría para Italia conquistar territorio desconocido y erigir un punto de inflexión en la historia de esta competición.
- Italia es el quinto país que consigue dos Ensaladeras consecutivas y podría ser el primero en ganar tres
Es cierto que el cambio de formato puede desvirtuar la comparación histórica, pero es un enigma establecer si resta o suma méritos a lo conseguido por el equipo italiano y a lo que podría conseguir en la Copa Davis. Y es que con el formato tradicional se podían jugar todas las eliminatorias en casa, algo que allanaba el terreno, o por el contrario, tener duelos a domicilio. Además, jugar a cinco sets podría beneficiar a las grandes figuras y reducir el margen de sorpresas.
Sea como fuere, Italia se puede equiparar ya con Estados Unidos (1978-1979 y 1981-1982) Suecia (1984-1985 y 1997-1998), Alemania (1988-1989), España (2008-2009) y República Checa (2012-2013) como los únicos equipos nacionales capaces de ganar la Copa Davis en dos ediciones de forma consecutiva. Nadie lo ha hecho en tres años seguidos desde que la competición puede considerarse un evento global y profesional. Así pues, Jannik Sinner y compañía tendrán una oportunidad de oro en la Copa Davis 2025 para hacer historia.